Calificación: **. Título original: The Bucket List.
Año de estreno: 2007. Género: Drama. Dirección: Rob Reiner. Guión: Justin Zackham. Actores: Jack Nicholson, Morgan Freeman, Sean Hayes, Beverly Todd,
Rob Morrow.
Va
a sonar a pliego de peticiones. Pero de verdad que no queremos más (van cinco)
largometrajes narrados por la voz sabia de Morgan Freeman. Y mucho menos largometrajes(van diez) en los que Morgan Freeman
interprete al prudente amigo negro del protagonista blanco. Creo que está bien
que este, Antes de partir, sea el
último. Porque en sus imágenes llanas, de comedia gringa de televisión, están
las pruebas de que las dos fórmulas están agotadas. No es que Freeman haga mal
su trabajo, no, ni más faltaba: sería incapaz de hacer algo como eso. Es que el
drama no le pide nada nuevo. Es que el drama es tan falso que ni él podría
conmovernos. Es que la producción confía en que será más que suficiente que él
se pare ahí, al lado de aquella otra leyenda del cine (que hace lo que puede,
el pobre Nicholson, para encontrarle variaciones al personaje arrogante que ha
hecho tantas veces), para que no nos demos cuenta de lo artificioso que resulta
el relato.
Que será
disfrutado, cómo no, por aquellos que busquen frases de consuelo del estilo de
“vive el momento” o “nunca pares de luchar”. O tendrá, en el futuro, el encanto
de haber reunido a semejantes actores. Pero que siempre será esta comedia
inverosímil que (en el primer acto) reúne a un mecánico con el dueño de una
clínica en una misma habitación para pacientes doblegados por el cáncer; se
convierte luego (en el segundo acto) en las alocadas aventuras de estos dos enfermos
terminales, el humilde Carter Chambers y el arrogante Edward Cole, que quieren
hacer, antes de morir, todo lo que no alcanzaron a hacer en vida; y termina,
sin querer, siendo ofensiva (en el tercer acto) con la gente que sí ha sufrido
semejante padecimiento, con los espectadores que no necesitan giros milagrosos
ni imágenes gigantescas para irse en paz a la casa y con una serie de talentos
que han hecho tanto por elevar la calidad del cine norteamericano.