Calificación: ***. Título original: Space Cowboys. Año de producción: 2000. Producción y Dirección: Clint Eastwood. Guión: Ken Kauffman y Howard Klausner. Actores: Clint Eastwood, Tommy Lee Jones, James Garner, Donald Sutherland, Marcia Gay Harden, James Cromwell, Loren Dean.
Es una historia sencilla: un satélite ruso está a punto de causar una tragedia y Frank Corvin, el diseñador del aparato, es el único que puede evitarla. Hace 40 años hizo parte del equipo Dedalus, un cuarteto de científicos y de pilotos que, por culpa de los avances tecnológicos, la burocracia y las envidias personales, nunca pudo llegar al espacio. Hoy está retirado y sólo quiere pasar sus días con su esposa. El espacio no le cabe en la cabeza.
Pero es cuestión de vida o muerte y Corvin, como cualquier héroe, está dispuesto a ayudar. Sólo tiene una condición: que el equipo Dedalus, completo, se encargue de la misión. Que, después de toda la injusticia, se les devuelva la oportunidad que se les quitó y se los deje viajar al espacio para reparar la máquina. El problema es que, para ese momento, los del grupo están enfermos, se han quedado calvos, han comenzado a perder la vista y las mujeres más atractivas podrían ser sus hijas. O sea que están viejos. Y el mundo de ahora, conectado por antenas y por cables, es un país tiranizado por los jóvenes.
Clint Eastwood es un maestro del cine. En sus últimas películas –Imperdonables, Los puentes de Madison y Poder absoluto- se ha dedicado a demostrar que la juventud, como dicen, es una enfermedad que se curacon el tiempo. En Jinetes del espacio, una comedia que se convierte en un relato de ciencia ficción, revela que las superproducciones de acción de estos años –esa suma de trucos, sorpresas y lugares comunes- se lo deben todo a directores como él. La prueba es que, con un material tan obvio e inverosímil como éste, él puede lograr, por lo menos, una aventura divertida.