El embajador del miedo

Calificación: **. Título original: The Manchurian Candidate. Año de producción: 2004. Dirección: Jonathan Demme. Guión: Daniel Pyne y Dean Georgaris, basado en el guión de 1962 escritor por George Alexelrod y en la novela de Richard Condon. Actores: Denzel Washington, Liev Schreiber, Meryl Streep, Jon Voight, Kimbery Elise, Vera Farmiga, Jeffrey Wright.  

El director Jonathan Demme, nacido en Nueva York el 22 de febrero de 1944, fanático de las películas desde que era un niño, discípulo aventajado del gran Roger Corman, es uno de los grandes misterios del cine de estos años. Sí, ha sido capaz de filmar largometrajes tan interesantes como Casada con la mafia (1988), El silencio de los inocentes (1991) o Philadelphia (1993), pero porque sí, porque le dio por ahí, porque no se le ocurrieron historias nuevas qué contar, ha fracasado en el intento de volver a filmar dos obras maestras del cine norteamericano: la deprimente La verdad sobre Charlie (2002) es la nueva versión sin pies ni cabeza de una extraordinaria comedia de suspenso llamada Charada (1963) y la decepcionante El embajador del miedo (2004) se toma demasiado en serio la trama macabra de una sátira genial titulada El candidato de Manchuria (1962).

Los primeros 45 minutos de El embajador del miedo, que nos obligan a preguntarnos "¿qué está pasando en la cabeza vacía de esos personajes?", "¿qué le habrá pasado a ese candidato a la vicepresidencia de los Estados Unidos mientras estaba en el ejército?", "¿qué es lo que no recuerda el teniente Ben Marco de sus días de pesadilla en la primera guerra de Irak?", consiguen hacernos sentir, en tiempos de George W. Bush, que estamos ante un largometraje relevante. Sin embargo, a medida que se resuelven todas las preguntas, la emoción que producen las buenas películas es reemplazada por la profunda decepción que traen las fantasías que se toman a sí mismas demasiado en serio.