Calificación: **1/2. Título original: Sweet Home Alabama. Año de producción: 2002. Dirección: Andy Tennant. Actores: Reese Witherspoon, Josh Lucas, Patrick Dempsey, Candice Bergen, Mary Kay Place, Fred Ward.
Las comedias románticas suelen narrar el encuentro casi imposible entre dos mundos. Y los de No me olvides, que en inglés se titula Sweet Home Alabama, son nada más y nada menos que el norte y el sur que se enfrentaron, desde 1861 hasta 1865, en la guerra civil de los Estados Unidos. Melanie Carmichael, la heroína, nació, creció y se casó en un pequeño pueblo de Alabama, en el sur, pero huyó a Nueva York, en el norte, siete años antes de que comience la historia, para convertirse en una sofisticada diseñadora de modas y dejar atrás los poco glamorosos rastros de su juventud. Y ahora debe volver a su casa, en donde su extraña familia y sus torpes amigos de la infancia, para pedirle el divorcio a su novio de colegio, Jake Perry, sin que su nuevo amor, Andrew Hennings, el popular hijo de la alcaldesa de la ciudad, se entere de los detalles de la operación.
Lo novedoso de No me olvides, pues, está en que narra un reencuentro. Y en que el final feliz depende de que Melanie, la falsa neoyorquina, se sienta orgullosa de sus orígenes y acepte que se ha estado diciendo mentiras durante los últimos siete años de su vida. Quiero decir que en esta comedia romántica los dos mundos se encuentran, al final, porque uno de los dos recuerda, como si se liberara del hechizo de una bruja, que no es diferente del otro. Sí, claro, estas cosas sólo ocurren en las telenovelas y los cuentos de hadas. Pero el director, Andy Tennant, que nos contó de nuevo vez la historia de Cenicienta en Para siempre y se empeñó en volver a filmar el célebre romance de Ana y el Rey, jamás ha dicho lo contrario.