Matrix recargado

Calificación: **. Título original: Matrix Reloaded. Año de producción: 2003. Guión y Dirección: Andy y Larry Wachowski. Actores: Keanu Reeves, Carrie Ann-Moss, Lawrence Fishburne, Harold Perrineau, Monica Bellucci, Hugo Weaving.

Conviene recordar que el mundo, según la trilogía de The Matrix, es un programa diseñado por un experto en computadores. Que todo lo que experimentamos es, en verdad, una ilusión. Y que un grupo de hombres que se niegan a vivir aquella "realidad" harán lo que sea para desmontar la gran ficción y devolverle a la humanidad la verdad con ve mayúscula. Habría que preguntarse, después, ¿de qué nos sirve el fondo de una película si no hay nada en el frente?, ¿qué importan las ideas brillantes que le dan origen a un relato como éste si sus escenas son innecesarias coreografías y sus personajes carecen por completo de sentido del humor?

Si en las premisas de la primera parte podíamos reconocer el mito de la caverna y las ideas de importantes filósofos de nuestro tiempo, en las de esta segunda, Matrix recargado, descubrimos las eternas preguntas por nuestra voluntad y nuestro destino, pero lo hacemos, una vez más, a pesar  de las explosiones sin sentido, las peleas interminables, las actuaciones risibles y las detestables secuencias alegóricas que escupen símbolos y frases célebres sacadas de los cuadernos de algún estudiante de tercer semestre de filosofía.  

La película, claro, tiene sus méritos: traduce a la sensibilidad de nuestros días los mitos y las preguntas que nos hemos hecho desde siempre, nos obliga a preguntarnos si seremos brutos y nos pone a discutir con nuestros mejores amigos en el camino a la casa. Pero que nadie diga que su gran logro es ser profunda. Porque ser profundo, se sabe, es lo más fácil del mundo: basta con decir "Dios" y "destino" un par de veces.