Calificación: ***. Título original: Kirikou et la sorcière. Año de producción: 1998. Guión y Dirección: Michel Ocelot. Dirección de animación: Inga Riba. Música: Youssou N'Dour.
Una voz viene desde dentro de una mujer embarazada. Es la voz de un niño que quiere nacer. Su madre, consciente de que "quien puede hablar desde el vientre puede nacer solo", lo invita a venir al mundo. Y él, solidario, astuto y dispuesto a todo, sale de ese cuerpo, corta el cordón umbilical y se nombra a sí mismo Kirikou. Ahora, ya que se ha dado su propia vida, está listo para salvar a las mujeres, los niños y los ancianos de su aldea, un caserío perdido en el occidente de África, de los terribles maleficios de una poderosa hechicera llamada Karaba.
Karaba, una mujer inmensa y llena de telas y de joyas, ha secado los ríos y la vegetación y se ha llevado a los hombres de la tribu. Y Kirikou, que es muy, pero muy pequeño, y en cambio no siente la necesidad de vestirse, está dispuesto a vencerla y sospecha que, para lograrlo, debe encontrar la respuesta a la pregunta de por qué ella es una mujer tan mala. Algo, una intuición, lo hace pensar que todos los problemas de la aldea se terminarán cuando obtenga esa respuesta. Y está convencido, por que sí, de que obtenerla es su destino.
Kirikou y la hechicera contiene todas las emociones, las preguntas y los mitos que inventan las tribus y los niños. Es una película de dibujos animados que, sobre la base de una más o menos conocida leyenda africana, y gracias a una serie de imágenes inspiradas en el arte primitivo de la región, describe, con asombro y sentido del humor, la experiencia de cualquier hombre en el mundo: la dolorosa llegada a la tierra, la increíble inminencia del tiempo, el descubrimiento de la belleza del cuerpo, las tercas versiones que los adultos dan sobre los hechos, las complejas relaciones entre los dos sexos y, sobre todo, el aprendizaje, en medio de la familia y la comunidad, de la solidaridad y la compasión.
Michel Ocelot, el director, trabajó durante cinco años en la realización de la película y, aunque ha sido traducida a casi todos los idiomas, se ha estrenado en todo el mundo y ha recibido el Gran Premio del Festival de Annecy y el Primer Premio del Festival de cine infantil de Chicago, dice que su mayor satisfacción ha venido de los elogios que los niños le han hecho a la historia y a su héroe. El comentario más divertido que recuerda, dice, "es el de una niña que salió del teatro exclamando ¡esta es la mejor película de Disney que he visto en mi vida!"
Kirikou y la hechicera no se parece a la mayoría de los relatos de dibujos animados. Para comenzar, la música de Youssou D'Nour consigue un sonido primitivo gracias a la grabación de las voces y los instrumentos clásicos de la música africana. Además, la historia está a la altura de la sensibilidad y la inteligencia de los niños y su protagonista no es un héroe porque sea el más inteligente o el más fuerte sino porque piensa todo el tiempo en los demás.